Semillas chicas

Las semillas chicas provienen de la punta de las mazorcas y pueden ser una excelente opción para los agricultores que siembran en condiciones de seco, además de que pueden ayudar para obtener una germinación más rápida, es decir, de 5 a 8 días, cuando el promedio es 7 a 12 días.

De acuerdo con el Ingeniero Agrónomo Iván Francisco Pérez Villarreal, el rendimiento depende del híbrido, no de la forma o tamaño, así que no hay ninguna desventaja con sembrar este tipo de semillas.

El ingeniero asegura que la información genética está en el embrión y que el éxito para tener vigor y sanidad recae en el manejo del agricultor, mas no en el tamaño de la semilla.

Un trato especial

Obtener los mejores resultados en la cosecha requiere de poner atención en los elementos con los que se está trabajando. Por eso, aunque los diferentes tamaños de semilla puedan generar plantas con el mismo potencial, es importante poner atención en las recomendaciones técnicas.

La primera es la calibración de equipos, la cual debe hacerse antes de la siembra para evitar diferencias en las profundidades. De no ser así, la emergencia de las plantas tiene posibilidades de retraso.

También es importante nivelar las condiciones de succión de aire y la profundidad de siembra. Se sugiere que haya una succión de aire menor que cuando se siembran tamaños medianos o grandes y el nivel de profundidad no debe ser mayor a cinco centímetros.

De esta forma el agricultor tendrá menos probabilidad de “cuateo”, es decir, que salgan dos plantas juntas como consecuencia de que cayeron dos semillas juntas.

La densidad y la velocidad de siembra son otras acciones que deben ser tomadas en cuenta para ayudar a mejorar los rendimientos. Las velocidades de más de cinco kilómetros por hora influyen en la profundidad de siembra y esto puede causar problemas de plantas retrasadas, así que lo ideal es mantenerse por debajo.

Todo a su tiempo

Además de las recomendaciones técnicas, las semillas chicas pueden tener una emergencia más exitosa si se siembran en las fechas óptimas de acuerdo a la zona en la que se encuentre.

Por ejemplo, en el caso de Sinaloa, el agricultor del norte debe hacerlo del 6 al 30 de noviembre, mientras que el del centro o sur lo hará del 15 de noviembre al 26 de diciembre. Elegir las fechas dependerá de cuando se encuentren las condiciones de temperatura y clima ideales para la siembra de maíz, que son de 18 a 22ºC.

Por último, es recomendable que se realicen revisiones de la humedad en los diferentes lotes de siembra, ya sea con el uso de herramientas o apretando un puño de tierra que forme una masa, sino lo hace no será un suelo apto para la siembra.

Si bien el tamaño de la semilla no está relacionado con el potencial de los rendimientos, deben tomarse las medidas necesarias para que el agricultor que decide sembrar con semillas chicas pueda obtener todos sus beneficios.